Aquello sucedió mientras leía la edición de Félix Martín sobre los "Relatos" de Edgar Allan Poe (Cátedra, Letras Universales, 2012). En la página 14 apareció un comentario del conocido crítico literario Harold Bloom en el que califica la poesía del escritor de Boston como digna de poca atención, de hecho la sitúa detrás de autores tan poco conocidos como Jones Very, Timrod y Tuckerman...
“¡Jones Very!”..., su nombre me llamó de inmediato la atención: "¿no tengo acaso un Lp de una banda con la misma denominación?". Busqué en la balda correspondiente y extraje el disco, "Radio Wave" (Bitzcore Rcds, 1991), allí estaba el vinilo de una formación a la que ya iba teniendo ganas.
No todo aconteció de manera tan sencilla, lo comento porque en cuanto me puse a escribir se me vino el mundo encima. No había forma humana de centrarse, por mi cabeza galopaban un buen puñado de distintas influencias musicales. Alimentadas por la escucha sucesiva (en una nueva e inesperada sesión nocturna) el ambiente se iba volviendo cada vez más incontrolado.
El Black Lives Matter de Marvin Gaye ("What´s Going On" y "Marvin Gaye Live"), Sam Cooke ("Live At The Harlem Square Club"), Isaac Hayes ("Hot Buttered Soul") y Martha and The Vandellas ("Dance Party") se hizo pronto con el mando de las operaciones; para compensar tanta abundancia de momentos estelares no se me ocurrió más que acudir a Gong ("You"), The Flying Lizards ("S/T") y Make-Up ("In Mass Mind"), y allí me enfrenté a una necesaria variante de sonidos etéreos y a ratos chirriantes; finalice la sesión con My Bloody Valentine ("Loveless") y Teenage Fanclub ("A Catholic Education"), convencido de que esas eran las obras definitivas, las que realmente buscaban los titulares. Para rematar el caos mental, a ráfagas iban llegando los recuerdos de algunos de los temas escuchados durante la tarde anterior, el sorprendente descubrimiento del "Casiopony" de Achilifunk Sound System, una banda catalana de rumba moderna.
Aun ahora, me cuesta reconocer si me acosté convencido de haber superado la prueba.
Lo primero que hice a la mañana siguiente fue intentar localizar el espacio geográfico de ambos protagonistas Jones Very. La banda de rock homónima grabó este "Radio Wave" en vivo en las emisoras universitarias WJUL y WMBR (de ahí su nombre) de Lowell y Cambridge, ambas en Massachussetts, el mismo estado en el que está ubicada la ciudad de Salem, lugar de nacimiento del Jones Very poeta. Ahí encontré un punto en común.
"¿Vic Bondi, líder de la banda, ...acaso la haya llamado así en homenaje a este poeta oscuro?" En segundo término, investigué sobre las ciudades de Lowell, Cambridge y Salem. La primera, origen del favorito Jack Kerouac, descendiente de emigrantes franco-canadienses establecidos allí hacia 1880 al amparo de la entonces poderosa industria textil de la zona. Cambridge, una de las grandes capitales culturales norteamericanas, sede de la prestigiosa Universidad de Harvard, en su ambiente literario fueron protagonistas, entre muchos otros, escritores como T.S. Eliot, E. E. Cummings, Margaret Fuller o el filósofo William James. Salem, ciudad más conocida por los episodios de la caza de brujas del siglo XVII (a añadir la exitosa revisión teatral como “Las brujas de Salem” de Arthur Miller en 1953). Las tres quedarían encuadradas en la célebre "Miskatonic Region", ruta literaria donde muchas de las escenas de H. P. Lovecraft tienen lugar.
La cosa prometía.
Aunque nacida de las cenizas de Articles of Faith, formación de Chicago, la banda Jones Very es originaria de Boston; ambas dan continuidad al estilo punk-melódico que se extendió rápidamente por los EEUU durante los primeros años de la década de los 90. La apuesta de Jones Very, también alineada con el indie más hardcore, recoge en Molly Hatchet, Fugazi o Hüsker Dü a sus referencias más próximas. El activismo de su líder, Vic Bondi, seguidor de la izquierda progresista de raíz universitaria, recogía las reivindicaciones sociales y políticas para traspasarlas a sus textos. Al enfrentarme a la funda de los créditos observé (“¡se me pasó de largo durante casi treinta años!”) la existencia de un pequeño recorte de prensa en la parte inferior; allí, como en un manuscrito antiguo, un tal Tim Perlich entrevistaba a Vic Bondi: "el nombre del grupo "proviene de un ministro protestante que, durante los 1830s, formó parte de un grupo de Trascendentalistas que, incluyendo a Henry David Thoreau, buscaba lograr una nueva perspectiva vital, que todos los elementos de la vida diaria quedaran imbuidos por un halo de profundidad espiritual" (sic).
“¿Vic Bondi y Jones Very confluyen en sus textos, en su forma de ver la vida?”. En cierto modo sí lo hacen. Ambos son excéntricos de la soledad y del estudio. Jones Very estudia en Harvard a Shakespeare, está obsesionado con el personaje de Hamlet, su padre lo lleva a conocer el castillo de Kronborg con tan solo nueve años de edad. Queda impresionado. Vic Bondi estudia Historia Moderna en Boston, lleva tres años aplicadísimo, sin tocar en ningún grupo, así que pronto ha llegado a la conclusión de que necesita salir de nuevo a escena. Lo hará dando continuidad a sus antecedentes líricos de condena social, la música le sigue pareciendo el medio más apropiado para seguir dando publicidad a sus ideas.
Jones Very está convencido de ser el origen del pecado original. Necesita a toda costa salvarse y sabe que abjurando de las relaciones sexuales tiene buena parte del camino andado. Harvard le sirve de trampolín. Su propia figura humana, alta, mística, elegante, irradia un aura de santidad. Escribe como Shakespeare debía haber escrito pero no le culpa por ello. Es presentado en el gran sanedrín de Nueva Inglaterra y se le acepta. Vic Bondi pretende también emplazar al individuo en un contexto social donde lo político y lo espiritual fueran de la mano. Comenta que desde su obra anterior, “Words and Days” (Hawker Rcds,. 1989), persigue la idea de conectar las cosas. Las mentes más conservadoras rechazan a Jones Very, le obligan a entrar en un asilo. Allí escribe sus mejores obras.
Soy de los que cree que el poco reconocimiento que se le confiesa en EEUU al poeta y religioso Jones Very ha influido en la corta carrera del Jones Very de Vic Bondi. Actualmente sigue al frente de varias bandas, buscando en el fracaso de ambos Jones Very su "Draft Morning" (suenan ahora The Byrds).
No me sonaban de nada ni Jones Very ni Vic Bondy, pero tu texto me ha enganchado sin remedio. No sé si podría incluirse anexado a las 'Vidas paralelas' de Plutarco, o a la 'Historia universal de la infamia' de Borges. Yo tiraría más por esto último, porque Jones Very se las trae... Eso de convertir a su madre, que era librepensadora, a ese extremo religioso me ha dolido. En cualquier caso, no se puede negar que es un personaje interesante.
ResponderEliminarIba a decirte que igual, en algún lugar del mundo, un estudiante de agronomía avanzada, estudiando la historia de la disciplina, se ha detenido de repente... '¡Jethro Tull! ¿De qué me suena ese nombre?' Pero sospecho que la vida de este señor no fue tan interesante como la del poeta americano. O no, quién sabe...
Yo también me inclino por emparejar al personaje con Borges. Es lo que tiene el maestro argentino, te descubre mundos en cualquier palma de la mano.
EliminarLo de Jethro Tull está bien apuntado, el símil es indiscutible.
Gracias y saludos,
Javier.
Vaya con Jones Very. He buscado en la Wiki su biografía. Imagino que tú también. No he encontrado poemas traducidos. Su vida sí que es interesante. Sin embargo, la banda de música del mismo nombre no hace una música que a mí me interese mucho. Tus escritos de una cosa me lleva a la otra… son muy curiosos. A veces también utilizo ese método casi sin darme cuenta. Aunque yo soy más caótico.
ResponderEliminarHas nombrado a “You”, de Gong. Fue un disco de cabecera durante mucho tiempo en nuestra casa. Y no digamos Marvin Gaye ("What´s Going On”) Sam Cooke, Isaac Hayes ("Hot Buttered Soul") y Martha and The Vandellas. Me gustaría leer algún poema de este poeta. Aunque asusta un poco su currículo (Segunda venida de Cristo, bipolar, manicomio, místico, transcendentalista…).
Otro buen rato he pasado leyéndote. Gracias, Javier.
Saludos.
Gracies Bab, la verdad es que este Jones Very fue un personaje que tuvo su tirón entre la sociedad intelectual de la Nueva Inglaterra americana del XIX, que era la que intelectualmente partía el bacalao. Tiendo a pensar que su mensaje, puritanismo e individualismo a ultranza, literatura vista como educación a ultranza, sigue teniendo cabida en la sociedad americana de hoy mismo. Tampoco he encontrado ninguna traducción de sus "Essais and Poems", lo cual viene a decir bastante de la importancia literaria del personaje. Lo que me atrajo de él, en definitiva, fue su papel de fracasado.
EliminarGracias y saludos,
Javier.
Y me olvidé de Kerouac y de Cummings. Tengo canciones con letras suyas. La de Cumming empezaba: Mi amor/tus cabellos son reino/ cuyo rey es lo oscuro/tu frente es un vuelo de flores/tu cabeza es bosque vivo…
ResponderEliminarLas referencias literarias en el texto tienen evidentemente su importancia. Además, se parte de E. A. Poe, lo cual ya es una señal de por donde van los tiros. No he leído nada de e.e. cummings (parece ser que a él le gustaba que su nombre se escribiera en minúsculas). Ya lo remediaré.
ResponderEliminarAupa!!
Javier.