GRAM PARSONS "GP"
Cuando Gram Parsons, acompañado de los miembros de su International Submarine Band, llega a Los Angeles a mitad de 1967 lleva en su equipaje algo más que sus instrumentos. Trae consigo toda una tradición sureña de religión y alcohol que, expresado así, de modo tan sucinto, podría quedar un tanto banal. Del alcohol, de cuya ingesta hay sobrados datos que demuestran una más acusada afición en los estados meridionales de la Unión, Gram sigue sin demasiada dificultad la tradición etílica familiar y en cuanto a la religión, él fue, a su manera, un hombre de sólida formación cristiana (fruto de la influencia femenina familiar, sin olvidar tampoco que elige la Teología como carrera universitaria en Harvard), tal que su filosofía de vida quedaba enmarcada en un concepto de Dios como ser transmisor de la paz y la armonía a la que todos los hombres tenían acceso. Y es importante fijar claramente esta idea porque de esta premisa parte toda su música hacia una suerte de comunión universal, hermandad entre intérpretes y oyentes, que él mismo bautizó como la "American Cosmic Music".
Allí en Los Angeles se acrecentarán también varios de los elementos que marcaron la personalidad de Gram. Su interés evidente por culminar su carrera musical, desarrollando el estilo del que iba a ser principal pionero e impulsor, el "country-rock", conectado con la rama "western" de Bakersfield de la que hablamos en la entrada anterior. También se multiplicarán en las soleadas tierras californianas sus, muchas veces incontroladas, ansias de vivir como un "rock-star" sin ningún tipo de complejo, deseos que puede llevar a cabo gracias a los fondos económicos que seguían llegando puntualmente. El alcohol y las drogas (de las que ya era habitual consumidor en su época en Nueva York) serán los medios de los que Gram se valga para alcanzar ese reconocimiento. Imagen que después, cuando entre en contacto con "la crème" de los Rolling, alcanzará su punto de sofisticación. Este último rasgo de su personalidad le llevará, además de a un fuerte deterioro físico acrecentado con el paso del tiempo (observen detenidamente su cara abotargada en la cubierta del "Grievous Angel" de la anterior entrada, reflejando a un Gram que ha engordado 20 kilos en un muy corto espacio de tiempo, y no precisamente por seguir la "dieta Brando"), le conducirá, como decimos, a un "pasotismo" que será su seña de identidad en muchos momentos de su estancia en California. Su vitalidad y energía inicial en cualquiera de los proyectos en los que embarcaba quedaban, al poco tiempo, aparcados por un abandono y apatía propios de un ser caprichoso y vulnerable.
Y a todo esto solo podríamos reseñar un fiasco menor en lo que supone el desarrollo de su carrera musical en Los Angeles, fracasos de ventas de sus obras aparte, cuestión que tampoco preocupaba demasiado a un Gram que nunca vivió realmente de la música. Fue éste el rechazo final que Roger Corman hace de su participación en la película "The Trip" al considerar que su tema no cuadra con el ambiente psicodélico de la cinta, eligiendo como pieza sustituta otra compuesta por unos Electric Flag más en la onda. Fuera de este minúsculo incidente, Gram y su I.S.B. no tienen demasiados problemas en contactar con el prestigioso Lee Hazlewood, "factotum" entonces de la niña Sinatra, que les produce su magnífica primera y única obra "Safe At Home".
El album aparece ya en 1968, mágico y explosivo año, y cuando lo hace Gram lleva ya algún tiempo a su aire, sin querer saber nada del grupo, divirtiéndose con Chris Hillman y correteando detrás de la entonces novia de David Crosby, una hermosura llamada Nancy Ross con quién llega a casarse y a tener una hija. Los miembros de I.S.B., cansados de la actitud de Gram vuelven a Nueva York donde forman, curiosamente, el primer Flying Burrito Brothers, versión costa este. Los acontecimientos, entonces, parecen desarrollarse a una velocidad de vértigo, tanto así que en pocas semanas Hillman convence a Gram para presentarse a una audición como sustituto de Crosby en The Byrds. McGuinn hace interpretar a Gram material al piano del jazzman McCoy Tyner y según sus propias palabras : "lo hizo, ¡y sonó muy bien!, así que obtuvo el trabajo".
A pesar del amplísimo criterio común que considera la obra de Gram con The Byrds, el célebre "Sweetheart Of The Rodeo", grabado en Nashville, como no podía ser de otra manera, y producido por el muy reconocido Gary Usher, como la obra cumbre del "country-rock", hay otros que tildan de adulterado a este insigne trabajo. Y es que Gram, que inicialmente canta en TODOS los temas, se ve relegado en la producción final del disco a ejercer como mero guitarrista, siendo su voz sustituida finalmente por la de McGuinn, que regraba todos los temas con su voz. Cuestiones contractuales incumplidas por Gram con el Hazlewood de su anterior "Safe At Home", previenen a McGuinn de entrar en futuros problemas. Gram, principal impulsor y alma de uno de los discos más fundamentales de la música rock, queda relegado a un papel segundón. No seré yo quien menosprecie el inmenso valor de esta obra. McGuinn, no obstante, perro viejo, se da cuenta del inmenso potencial que aporta Gram a su banda y, quien sabe si movido por un deseo compensatorio, deja a Gram el protagonismo principal en la histórica grabación que hace la banda en el Grand Ole Opry. (Hay un magnífico disco editado por el sello Sundazed, "Sanctuary IV", que refleja fielmente esta grabación).
¿Y cuando aparecerá Keith Richards en toda esta historia, se preguntarán algunos? Pues queda poco realmente porque en Mayo de ese 1968, antes de la edición final del "Sweetheart Of The Rodeo" y de la gira que la banda hace en Inglaterra en Julio, Gram se encuentra en Londres y conoce a unos Rolling Stones que ya empezaban a estar interesados en ahondar en el "country" como un nuevo elemento inspirador de su música. Un famoso "viaje" en Rolls Royce a los monolitos de Stonehenge sella una amistad duradera. La gira de Julio, que debe continuar en Sudáfrica, ofrece a Gram la excusa perfecta. Aduciendo sentimientos antiracistas, contrarios al "apartheid", decide caerse del cartel y abandonar la banda apenas tres meses después de su entrada. Por supuesto le faltó poco tiempo para acudir a visitar a su nuevo amigo Keith.
La relación de Richards y Gram es parecida a la de unos vasos comunicantes. Mientras uno se empapa de los conocimientos estilísticos del otro, fuente de la que beberán para dar sentido y amplitud a obras magnas como "Sticky Fingers" y "Exile On Main Street", el otro se introduce en los más altos y sofisticados niveles del "stardom" roquero, aspiración que ha venido persiguiendo desde hace tiempo con empeño. Hay algunos entendidos que opinan, lo he leído en varios medios, que Gram crea entonces un grupo propio, los Flying Burrito Brothers, versión costa oeste, a imagen y semejanza de los Rolling Stones. Pero de eso, y de las últimas obras de Gram, hablaremos en el siguiente y definitivo capítulo de esta pequeña serie que, espero, esté entreteniendo a los que aun tuvieron paciencia para llegar hasta estas líneas finales.
ansioso x la 3 parte. Instructivo repaso. fenomenal
ResponderEliminarHas superado mis expectativas sobre la 2º parte con creces. Por fin, alguien que le hace un homenaje en su justa medida a GP. Saludos
ResponderEliminarGracias Antonio por pasarte y tus comentarios. Me he divertido un huevo haciendo esta pequeña serie.
EliminarSaludos,
Javider.