FRANK ZAPPA "HOT RATS"
¿Tienen ustedes la cubierta del "Hot Rats" a la vista, bien el Lp o CD ("emepetresianos" y similares no están invitados)?..., ¿ese individuo asomando su cabeza desde una piscina vacía, sus manos apenas apoyadas en el quicio de cemento, la hierba ya selvática en un entorno que se presume como un jardín abandonado, todo en un color sepia que imagina una suerte de aparición espectral?...Tal así me encuentro después de haber pasado un "ferragosto" de pesadilla en Madrid, polvo africano convertido en hirvientes alientos metálicos día a día, alocadamente disparatado, sin orden ni gobierno que me guíe.
Afortunadamente, lejos de que ocurra un mimetismo paranoico entre la imagen comentada y el oyente perceptor (servidor), el contenido de éste "Hot Rats", primer trabajo de Frank Zappa sin The Mothers Of Invention en 1969, viene a suponer una auténtica liberación sensorial, a la par que un gratificante chorro-fuente de agua fría, delicado y agradecido correr de fluidos que hacen olvidar los tormentosos momentos estivales a los que me he visto sometido estas semanas atrás.
No soy experto en Zappa, ya lo apunto desde el principio. Allá por el año 1972 mi hermano adquirió el "Volumen 14 del Pop History", dedicado a Frank y The Mothers of Invention, del que si reconozco que nos deleitamos con profusión de escuchas, y del que quedó grabada la imagen indeleble del protagonista y de la banda como la de los más genuinos "freaks" de la época. Hasta el año 1978 no volví a prestarle atención, esa vez con el "Joe´s Garage, Vol 1" que no tuvo posterior continuidad, a pesar de un concierto en vivo al que asistí en el Pabellón del Real Madrid en Enero de 1981. Poco bagaje para tan excelso personaje.
Desde la primera audición del disco, y ya llevo más de media docena en un par de días, uno se enfrenta a sabiendas a un gran clásico de la música rock de todos los tiempos, fiel ejemplo del más genuino y auténtico "mix" entre ese estilo y el jazz, éste último sirviéndole como base estructural y esqueleto expresivo. De ahí que según lo voy escuchando una y otra vez, y ahondando entre sus espléndidos caminos y sorprendentes novedades (de entonces y de ahora también), me voy ratificando en algo a lo que concluí cuando salí entonces del concierto reseñado, que tanto Frank Zappa, él como grandísimo guitarrista, como su banda de acompañamiento, bien sean los Mother u otros, han sido uno(s) de los más grandes instrumentistas que ha dado la historia de la música rock. Guardo ese recuerdo imborrable del concierto, ¡qué bien sonaban, que sublime sensación de perfecto ensamblaje, de orquesta conjuntada en la máxima precisión!, pensamiento que me viene contínuamente a la cabeza mientras escucho maravillado este espléndido "Hot Rats".
Para aquellos expertos en el "más famoso bigote y mosca" de la historia del rock no merecerá la pena la mera reseña de los músicos que participan en éste trabajo. Como igual habrá alguno que como yo necesite dar algún apunte al respecto, comentar que Frank se reúne aquí con grandes músicos de la época, desde Captain Beefheart a la voz en "Willie The Pimp", hasta Jan-Luc Ponty al violín en "It Must Be A Camel", los dos más conocidos, pasando por los bajistas Shuggy Otis y Max Bennett, baterías Ron Elico, John Guerin y Paul Humphrey y Sugar Cane Harris al violín. Todos ellos, más una sección de viento (saxos) de la que no se da cuenta en los créditos del disco, haciendo un papel realmente encomiable.
Escucho este "Hot Rats" y me retrotraigo al Miles Davis de "Bitche´s Brew" y "On The Corner", al primer "Return To Forever" de Chick Corea, al "Head Hunters" de Herbie Hancock, si bien en estos grandes es el jazz el armazón estilístico y el rock el aspersor que riega el jardín, justo lo contrario de Frank Zappa, no así en el fin perseguido, la bendita fusión, si no en los medios de los que estos artistas se valen para expresarse.
Y que grandes temas contiene el disco, inagotable la escucha, una y otra vez aceptada como una celebración, como una única e irrepetible experiencia de la mejor música que en contadas ocasiones se haya podido componer. "Peaches En Regalia", explosivo comienzo planetario, "Willie The Pimp", esos aullidos de Captain Beefheart que me susurran al oído que tengo que meterme en serio de una vez por todas con el "Trout Mask Replica" , la base rítmica de Humphrey y Bennett tan cercanos a una combustible fusión jazz-funk-rock en "Son Of Mr. Green Genes" y "Little Umbrellas"; Sugar Cane Harris, prodigioso su violín en "The Gumbo Variations", y ese comienzo de teclados de Frank con la progresiva recreación rítmica de Guerin y Bennett esta vez, karma total que da entrada a una secuencia de violín de Ponty que va ganando emoción escucha tras escucha en "It Must Be A Camel".
"Hot Rats" es un disco de total e ilimitada progresión. Tal es su grado de maravillosa penetración en la psyche del oyente. En estos días, en los que el infame lenguaje del sector servicios se ha adueñado de nuestras vidas, su audición se asemeja a una apuesta sin titubeos por la libertad de audiencia, esa que aun nos queda incólume después de tanta mandanga como nos hacen tragar.
(Entrada dedicada a Gonzalo Aróstegui Lasarte que un día, fecha no tan lejana en que esta tierra calcinada lo era menos, me recomendó con gran sapiencia este disco.)
Enfrentarse a Zappa es subir un alta montaña siempre que se escale correctamente. primero hay unos discos que podríamos calificar como de nivel medio de dificultad (Hot Rats es uno de ellos y a mi gusto de los mejores de su carrera) pero a a medida que ascendemos la cosa se empieza a poner difícil muy cuesta arriba. Todavía no puedo con ese Zappa. En todod caso Hot rats es un buen lugar para iniciarse
ResponderEliminarAhora que estamos con la Vuelta ciclista, muy oportuno tu símil de subir una alta montaña. La verdad es que el "Hot Rats" entra de maravilla, no me costó nada. De todas formas, siendo seguidor de Sun Ra, por mucho que se me ponga raro Frank, no creo que tenga problemas.
EliminarSaludos y gracias,
Javier
Me quedo con la colaboración de esos dos monstruos que son Zappa y Beefheart, véase ese inconmensurable Willie The Pimp y el magistral disco "Bongo Fury" del 75. Saludos
ResponderEliminarAlgo había oído hablar del "Bongo Fury". Tu calificación de "magistral" ya me ha puesto al acecho.
EliminarGracias y saludos,
Javier
Gran regalo en forma de recomendación que te hizo Gonzalo. "Hot Rats" -uno de mis discos preferidos de la historia- es la clase de obras, como te está pasando a tí, en los que merece la pena perderse una y otra vez descubriendo cosas (y sensaciones) nuevas en cada escucha. Yo por mi parte tengo el atrevimiento de recomendarte "The Grand Wazoo" donde Zappa y los suyos amplían la paleta de colores del "HR" en formato orquesta.
ResponderEliminarEstupenda entrada. Un saludo.
Pues tomo buena nota de tu recomendación Agente. Haré lo posible por hacerme con ese "The Grand Wazoo" y comentarlo.
EliminarGracias y saludos,
Javier
Mil gracias, Javier. Excelente texto, en especial el último párrafo. "Libertad de audiencia": qué grande eres, amigo. Ésa es la clave.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias a tí Gonzalo por tan excelente recomendación. Bueno, ya están los deberes hechos (AC/DC y Zappa), y a ver qué se nos ocurre a partir de ahora.
EliminarFuerte abrazo,
Javier